La Justicia de Ecuador dispuso este martes la prisión preventiva contra el ex presidente Rafael Correa en un nuevo episodio del lawfare en América Latina tras la detención de Lula da Silva en Brasil y la embestida legal contra Cristina Kirchner en el país.
La solicitud fue realizada por Paúl Pérez, fiscal general encargado, y aceptada por la jueza Daniella Camacho, quien además pidió que se extienda una alerta roja de Interpol para que el ex mandatario sea capturado en Bélgica, donde reside desde hace un año.
Luego que la Fiscalía General pidiera la prisión preventiva, la Corte Nacional de Justicia aceptó la solicitud para solicitar a Interpol el arrestro y la extradición del ex mandatario ecuatoriano.
Correa se presentó este lunes ante el Consulado de Ecuador en Bélgica, país donde reside, para hacer cumplimiento de la medida cautelar impuesta el pasado 18 de junio.
No es la primera vez que Correa comparece ante el Consulado ecuatoriano, durante la fase de investigación del caso, el exmandatario se presentó mediante una videoconferencia en una declaración voluntaria.
LA REACCIÓN DE CORREA EN LAS REDES
Agradezco a tod@s sus muestras de solidaridad ante este nuevo y grave atropello a la justicia y mis derechos.
Yo estoy bien. No se preocupen.
Buscarán humillarnos y hacernos pasar un mal rato, pero una monstruosidad así JAMÁS prosperará en un Estado de Derecho como Bélgica.— Rafael Correa (@MashiRafael) 3 de julio de 2018
Fiscal puesto a dedo, vinculación sin ninguna prueba, jueza que se allana al desacato de la Asamblea Nacional, medida cautelar imposible de cumplir, etc. ¿Saben cuánto éxito va a tener esta farsa a nivel internacional? No se preocupen, todo es cuestión de tiempo. ¡Venceremos! https://t.co/zjjp67gl4D — Rafael Correa (@MashiRafael) 3 de julio de 2018