Nadie se salva de la crisis. El Grupo Mirgor, perteneciente al amigo del Presidente, Nicolás Caputo, anunció que despedirá a 63 trabajadores y que aplicará suspensiiones y recortes de jornadas en su planta de Río Grande, en Tierra del Fuego. ¿La razón? La suba de los costos de producción derivados de la suba del dólar y la fuerte caída del consumo interno.
El grupo, que fue fundado por el propio Mauricio Macri, se dedica actividades del rubro automotriz, electrónico y de telefonía móvil.
En octubre, la empresa echó 18 supervisores de la empresa que -pese a los reclamos y medidas de fuerza llevadas a cabo- no fueron reincorporados. El domingo pasado, en medio de rumores de despidos y del envío de telegramas de desvinculación de trabajadores, el personal de la planta fue convocado a una reunión.
Los delegados aseguran que, por el momento, los telegramas fueron frenados y que mantienen negociaciones con la empresa, que pretende despedir a trabajadores bajo el argumento de “bajo rendimiento” y “ausentismo”. También pretende instalar un sistema de retiros voluntarios.
Desde los gremios denuncian que con estas medidas la empresa «estaría violando el acuerdo firmado recientemente”. Sucede que el mes pasado, todas la compañías radicadas en el polo tecnológico de Tierra del Fuego suscribieron un acuerdo en el que se comprometíana sostener los puestos de trabajo,